Jeremías
“Jere” Trasante (16 años), Adrián “Patom”
Rodríguez (20) y Claudio “Mono” Suárez (20)
eran tres militantes del Movimiento 26 de Junio, organización
territorial del Frente Popular Darío Santillán, que el 1ero de
enero de 2012 festejaban entre amigos el año nuevo en la canchita de
Dorrego y Quintana, del barrio Moreno, en Rosario. Esa noche fueron
asesinados por un grupo de sicarios ligado al narcotráfico.
Recibieron de 6 a 8 tiros cada uno.
Rápidamente
la policía y algunos funcionarios hablaron de “ajuste de cuentas”;
de que hubo un “enfrentamiento”, de que los pibes tenían
“antecedentes policiales”. Nada más falso. Tenían
familiares, amigos, sueños, entusiasmos, proyectos y luchaban por
que estas redes de droga y corrupción dejaran de cobrarse la vida de
los jóvenes de los barrios pobres de Rosario y de todo el país,
demostrando que otro camino para las pibas y los pibes es posible.
La
acción de sus familiares, las y los compañeros de militancia y de
numerosas organizaciones políticas, sociales y de derechos humanos
de todo el país puso una realidad al descubierto: todas las semanas
mueren pibas y pibes en los barrios asesinados por bandas delictivas
en acuerdo con fuerzas policiales mientras el poder político mira
para otro lado.
Como
fatal prueba de esto, el 20 de junio, en plena lucha por justicia por
Patom, Jere y Mono, la misma trampa de complicidades volvió a
golpearnos llevándose la vida de César Oviedo, compañero del
barrio Vía Honda, que se ganaba la vida cirujeando con su carro y
poco tiempo antes había decidido sumarse al movimiento. Un sicario
lo mató por la espalda desde la puerta de un kiosco de droga, que
luego del crimen fue derribado por los vecinos enfurecidos. A siete
meses del hecho, el asesino de César sigue suelto y el kiosco de
droga funciona a pocos metros del anterior.
A
un año del triple crimen, junto a la incansable lucha y la
solidaridad de muchas organizaciones compañeras, hemos logrado que
salga a la luz la relación criminal entre narcos, policía, y
sectores del poder político y judicial. Conseguimos que haya 5
procesados en la causa por el asesinato de nuestros compañeros y la
apertura de una causa conexa que investiga las complicidades
policiales. Ahora queremos que todos tengan la condena que se
merecen.
Y
seguiremos peleando para que se desmonte esta monstruosa red que se
alimenta de la vida de las y los jóvenes de los sectores
populares.
Porque
queremos un cambio social profundo, una sociedad en la que todas y
todos los jóvenes tengan una vida digna, con educación, salud,
laburo estable y vivienda.
Porque
creemos que es posible reconstruir otro horizonte sin tranzar,
con dignidad, mediante la solidaridad, la organización y la lucha.
JUSTICIA
PARA TODAS Y TODOS LOS PIBES ASESINADOS POR LOS SICARIOS DEL
NARCOTRÁFICO
POR
EL DESMANTELAMIENTO DE LA TRAMA DEL NARCOTRÁFICO Y SUS COMPLICIDADES
INSTITUCIONALES
POR UNA VIDA DIGNA PARA TODAS Y TODOS: EDUCACIÓN, SALUD, TRABAJO Y VIVIENDA.
JERE,
MONO, PATOM Y CÉSAR: PRESENTES!
AHORA
Y SIEMPRE!
FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN – COMPA
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